martes, 2 de marzo de 2010

Tres meses de prisión a policía mató joven en Hato Mayor


MANUEL A. VEGA
HATO MAYOR.- La juez de la Instrucción del distrito judicial de Hato Mayor, aplicó tres meses de prisión, como medida de coerción a cabo de la policía que mató de varios balazos a un borracho, el pasado sábado en el sector Villa Ortega, Hato Mayor del Rey.
El agente confinado a prisión responde al nombre de Cristian Marte, adscrito a la 40ta Compañía de la Policía en Hato Mayor.
A otros agentes se les aplicó garantías económicas como coerción.
El agente Cristian Marte será llevado a La Romana, comunicó el fiscal, Manuel Emilio Santana.

Familiares de la víctima, pidieron justicia y el traslado del matado a una cárcel que no sea Hato Mayor.
HISTORIA DEL HECHO

HATO MAYOR.- Una patrulla de la policía mató de tres balazos a un hombre que en estado de embriaguez amenazaba con desprenderse sus orejas con un machete, hecho registrado la tarde del sábado en el sector Villa Ortega, al norte de Hato Mayor.
La víctima fue identificada como Cheo Roja Colomé, 32 años, residente en el sector San José y quien recibió dos impacta de bala por la espalda y otro un pie derecho, mientras huía de la patrulla policial.
Según testigos oculares de hecho, la víctima bajo una borrachera hacía ademanes con cortarse las orejas, por lo que vecinos de Villa Ortega llamaron al destacamento de la PN, llegando una patrulla tratando de evitar el borracho se suicidara con el filoso machete.
El borracho al ver la presencia policial, salió corriendo y al cruzar el arroyo “Paña-Paña”, que bordea el sector donde ocurrió la tragedia, la patrulla policial la emprendió a tiros, impactando tres en su negra anatomía.
Lo asesinaron en presencia de su padre, Generoso Roja, quien corrió al lugar a buscar a su hijo, porque le habían informado que estaba pasado de alcohol.
La policía cometió un garrafal error tras el hecho y fue que levantaron el cadáver y lo llevaron al hospital, sin la presencia del médico legista y un fiscal.
El cadáver de Cheo fue depositado en la morgue del hospital Leopoldo Martínez de Hato Mayor, donde fue examinado posteriormente por el médico legista, Santini Calderón Gastón en presencia de la fiscal adjunta, Kenia Romero.
Como es de rigor, el cadáver fue llevado al Instituto de Patología para fines de necropsia.

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