lunes, 26 de julio de 2010

Mujer prefiere tener de familia manada de perros que a parientes


MANUEL A. VEGA
HATO MAYOR.- Esto parece una novela o el libro de cuento “El Coloquio de Los Perros”, de Miguel Cervantes y Saavedra, pero no lo es. Resulta que  en el católico pueblo de Hato Mayor, una mujer enviudó hace varios años y ha optado en tener de amigos y familia a una manada de seis perros viralatas, quienes comen, defecan, orinan y duermen dentro de la vivienda.
A la mujer, altiva, pero de buena apariencia física, sus verdaderos familiares han dejado de visitarle, porque cuando asoman las narices a la vivienda, lo que se percibe es un olor a perro sin bañar.
 A decir de vecinos, la dama hasta la muerte de su esposo, un hombre origen árabe, sólo tenía en la vivienda a una perra, pero al morir su compañero, la dama parece optó por poner a reproducir el animal, con la cual se encariñó.
El mal olor que expide la vivienda ha alejado a los vecinos de la dama, que reside en el sector Las Guamas de Hato Mayor, quienes han reclamado de las autoridades de Salud Pública, intervenir para evitar la mujer enferme o adquiera una enfermedad de perro.
Tras denuncia de los vecinos, que se quejan de los nauseabundos y fétidos olores que salen de la vivienda, provocado por los canes, las autoridades de Salud Pública visitaron a la dama, pero las informaciones de que dispone Atacando.net, la dama echó bajo insultos al inspector Gerardo Polanco, quien pidió auxilio de las autoridades judiciales para enfrentar a la dama.
Atacando.net se enteró que una hermana de la mujer, cuyo nombre guardamos en la discreción, ha tratado de que la dama saque a los animales, pero ha sido imposible pese a los ruegos y súplicas.
 La mujer que prefiere tener en su casa a una manada de perros que  a parientes, se resiste a que los animales sean extrañados de su hogar, bajo el entendido: “Es que me cuidan de los delincuentes”.
Los perros son realengos o viralatas y la confundida mujer no permite que los animales se mojen cuando llueve.
Todo cuanto consigue y le dan sus familiares es para darle de comer a sus perros.
Cuando la dama suele salir a visitar a familiares, los canes  son dejados dentro de la casa, momento que aprovechan mozalbetes, para molestar a los perros, dando en un zinc adherido a la casa.
ENFERMEDADES QUE TRANSMITEN
Los perros pueden ser encantadoras mascotas  pero también pueden contagiar algunas enfermedades a los humanos, por lo que hay que conocerlas y tomar precauciones al respecto.
La babeasis es transmitida a través de la garrapata del género Dermacentor. Cuando ataca al hombre produce postración, fiebre, anemia hemolítica, hemoglobinuria (hemoglobina en la orina), ictericia, esplenomegalia (aumento de tamaño del hígado y el bazo) y artralgia (dolor articular).
La dermatofitosis es producida por hongos en perros. En los canes afecta la piel, los pelos y las uñas. Pero en las personas el efecto puede ser más devastador: molestia abdominal, náuseas, vómitos y diarrea, pérdida del apetito y de peso, entumecimiento y hormigueo de las extremidades y hasta confusión o demencia.
La sarna demodécica es producida por un ácaro. En el hombre se manifiesta con dermatitis pustulosa, úlceras y necrosis, ganglios tumefactos que puede afectar a todo el cuerpo.
La infestación de caninos con garrapatas no solo juega un papel importante por el daño que provocan las mismas al animal, sino porque además pueden actuar como agentes transmisores de enfermedades.
Algunas de estas enfermedades pueden ser transmisibles al hombre (zoonóticas).
Puede ocurrir que el ciclo se inicie cuando las garrapatas se prenden a perros enfermos y se transforman en vectores.
 Estas a su vez pueden pasar a otro perro y contagiarlo o accidentalmente se pueden prender al humano y transmitirle enfermedades.

Por tal motivo a medida que las personas comparten el hábitat con mascotas, se vuelve más importante conocer estas enfermedades y resulta de vital importancia controlar el ciclo de las garrapatas.
M

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