MANUEL ANTONIO VEGA
SAN PEDRO DE
MACORIS.- En medio de fuertes críticas a las autoridades judiciales de San
Pedro de Macorís, por no proteger a la joven abogada, cientos de personas acuden desde la tarde de
este sábado a la funeraria La Altagracia, donde están siendo velados los restos
Anibel González Ureña, quien fue asesinada de múltiples balazos por su expareja,
el empresario Yasmil Fernández Estévez.
En tanto que los
restos homicida-suicida fueron trasladados a la provincia Dajabón, de donde es
oriundo.
El cadáver del
empresario Yasmil Fernández Estévez fue depositado en el hospital Antonio Musa,
luego que se disparara a la cabeza, luego que hiciera tres disparos a la madre
de sus tres hijos, mientras que Anibel fue llevada en estado de gravedad,
falleciendo en la madrugada de este
sábado.
Mientras velaban
los restos de Anibel, familiares se quejaban amargamente de las autoridades del
Ministerio Público y la Policía Nacional por no proteger a su pariente que aun
estando preso su verdugo la amenazaba con arrancarle la vida.
Se recuerda que Anibel
González Ureña fue agredida a cuchilladas por su verdugo, porque ella no quería
reconciliarse con él, por los maltratos a que era sometida
Yamil recobró su
libertad tras un “extraño” acuerdo, que ha dejado seriamente cuestionado al
Ministerio Público en San Pedro de
Macorís.
Los familiares
sostienen que el comerciante debió
cumplir con la medida de coerción consistente en una orden de alejamiento, no
portar arma de fuego y presentación periódica.
La pareja llegó a
permanecer 12 años casados, llegando a procrear tres hijos, pero los celos hicieron
que ella se alejara de él
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