Padua avanza para regresar a la Sindicatura de El Seibo

EL VETERANO POLÍTICO DEL PARTIDO REFORMISTA SOCIAL CRISTIANO PRSC DICE QUE AHORA TIENE MÁS CONDICIONES Y Haría MÁS DEBIDO A QUE LLEGAN RECURSOS SUFICIENTES PARA RESPONDER A LA DEMANDA DE SERVICIOS QUE MERECEN LOS MUNÍCIPES SEIBANOS.

EL SEIBO: Luís Fermín Padua encamina una campaña ejemplar y muy original en busca del apoyo para regresar a dirigir el cabildo municipal en las elecciones municipales del próximo 16 de marzo.

El candidato del Partido Reformista Social Cristiano apuesta a su trayectoria, basado en la experiencia y lo que hizo cuando no llegaban recursos al ayuntamiento como ahora que superan los 8 millones de pesos mensuales.

Confía en que los munícipes que conocen de su trabajo y la forma como se desenvolvió cuando fue síndico, le darán el voto, para devolverle el sello, que requiere un ayuntamiento, en servicios, en buen manejo de las arcas municipales, la recogida de basura, disposición del personal y el respeto que debe emanar como institución.

En los días que lleva de campaña, ni acusaciones, ni dimes y diretes; su acciones la basa en lo que hizo cuando ocupó la sindicatura. A ello agrega una propaganda efectiva, que incluyó lanzar afiches desde una avioneta y propaganda estratégicamente colocada, en diversos puntos de la ciudad, por su eficiente equipo.

Sus inicios

Luis Fermín quien se inicia en los asuntos municipales de El Seibo, siendo secretario de la sindicatura, siendo Ramón Antonio Casado Díaz, principal ejecutivo;  fungiendo, además, como Secretario General del Partido Reformista.

Esas funciones, las compartía con las de secretario de actas en las sesiones del ayuntamiento, siendo designado por el síndico para asistir la tesorería municipal en la elaboración de las nóminas y los comprobantes de pago por su agilidad y versatilidad en el desempeño de las labores encomendadas.

Cuando Casado Díaz, pasó de la sindicatura a ocupar una curul en la Cámara de Diputados, Luis Fermín sale y queda como consultor honorífico, dado que siempre le consultaban sobre diversos manejos administrativos de la sindicatura.

Revela que para 1986 presenta su candidatura a síndico y tal cual caballero de La Mancha, esta vez sin la compañía de Sancho, se lanza a la reconquista de la sindicatura para el Partido Reformista, logrando una victoria tan contundente que lo motivó a dirigir un ayuntamiento sin banderías políticas abierto a toda la comunidad seibana.

En su gestión, todas las personas que acudían en busca de ayuda encontraban una mano solidaria. La honestidad y la pulcritud unidas a la apertura del servicio incondicional a la población fueron el sello principal de su gestión.

"Me correspondió eliminar o sanear la cañada de la calle Julio C. Dalmasí (prolongación General Santana) y construir la verja del ayuntamiento para salvaguardar las propiedades municipales. Otros colegas laboraron en obras importantes para la comunidad; los campos fueron atendidos mediante un programa de mantenimiento permanente de los caminos vecinales", explicó.

 Por primera vez se realizaron labores de mantenimiento al edificio del ayuntamiento, se construyeron aceras y contenes en Ginandiana, Los Cajuiles y Las Quinientas y también en Pedro Sánchez, mientras que el respaldo permanente y continuo al Cuerpo de Bomberos Civiles motivó que fuera designado coronel honorífico de dicha entidad.

El crédito

 En su gestión, el pago puntual de todos los compromisos económicos del ayuntamiento con el comercio local avaló su gestión y aumentó su popularidad; a los suplidores, se les pagaba y a tiempo.

Luis recuerda que llegó en un motor Suzuki ER125 a la sindicatura y salió a pie, con las manos libres, vacías y limpias como su conciencia pudiendo emular el pensamiento del ciudadano Kalil Haché cuando escribió: "Para comprobar la honradez, la honestidad y la lealtad de una persona esta tiene que haber pasado en sendero de su vida... entonces podrá vivir con un solo guardián, su conciencia".

Por su trayectoria, está confiado en que el domingo 16 de marzo, como ha recibido apoyo de munícipes sensatos en los barrios y comunidades que pertenecen al municipio, lo apoyarán para regresar con una gestión municipal, como se merecen los seibanos, sin desorden y sabiendo administrar adecuadamente los recursos del pueblo. (Compendio.: F. Durán; colaboración: Manolo Cotes)