jueves, 25 de junio de 2009

QUE VERGÜENZA! La casa de la Cultura Hato Mayor lleva 12 años en construcción


MANUEL A. VEGA

HATO MAYOR.- Ubicada justamente frente al parque Mercedes de la Rocha, la casa de la cultura, una estructura donde se concentrarán los intelectuales de Hato Mayor, sigue siendo una utopía, un sueño que se desvanece y que ha puesto a claudicar a muchos, que hoy no luchan para que la obra sea terminada.

Iniciada en el año 1997 por el síndico de la época, Ramón Benjamín O’brien (Ramón Colchón), quien a la hora de abandonar el cabildo habría dejado los fondos para su terminación, pero alegadamente fueron dilapidado por el síndico que lo sucedió en el cargo.

Desde entonces, la vieja estructura sólo recibió un poco de pañete porque el pasado administrador de la Lotería Nacional, Ramón Rivas, entregó dos millones para continuar los trabajos, los cuales fueron paralizados días después de terminar el proceso electoral último.

Actualmente una parte de la abandonada estructura está siendo ocupada por haitianos, que se atribuyen la edificación y dicen que no saldrán sino son indemnizados.

Durante el día está convertida en taberna de juegos, donde se está arrastrando a decenas de menores a los juegos y el consumo de drogas y en horas de la noche, la estructura es utilizada como casa de cita, donde jóvenes hacen el amor como si se tratara de un motel de la ciudad.

La casa de la cultura es también el sanitario municipal, debido a que todo el que va al parque Mercedes de la Rocha a recrearse y quiere realizar una necesidad fisiológica, corre a la edificación.

La clases intelectual y profesional de Hato Mayor ha mostrado apatía por que la obra sea terminada, diciéndose muchas veces que han claudicados por pesos que reparten los políticos de turnos que no se apuran en el desarrollo de la ciudad.

El síndico Amado de la Cruz ha dicho que gestiona con el gobierno la terminación de la obra, porque supuestamente los recursos que reciben no le permiten concluir la obra, que según dijo tiene un presupuesto de unos 17 millones de pesos.

Qué le han hecho a Hato Mayor, que sus habitantes están tan anestesiados, tan embotados y han pedido el espíritu de lucha que lo caracterizó y le dio tantas conquistas, para llevar a esta comunidad a la categoría de provincia.

Los bríos de los hatomayorenses se han perdido ciertamente, lo que es aprovechado por la muleta oficial para no hacer nada por la ciudad, fundada hacia el año 1520.

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