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domingo, 2 de febrero de 2014

Cazadores y el pez Gato amenazan con exterminar macos de la Hispaniola

MANUEL ANTONIO VEGA

HATO MAYOR.- Los anfibios nativos de la isla Hispaniola tienen como principales enemigos al hombre y el pez Gato, una especie introducida, que está exterminando no solo con los peces nativos, sino con los macos o ranas endémicas de la isla, que son verdaderos y genuinos biocontralodores de fauna y flora dominicana, denunció la sociedad ecológica “La Vida Está en los Árboles”.
La entidad ambientalista consideró de  “dramático” el exterminio que lleva el pez Gato de ranas y peces en ríos, arroyos y lagunas de poblaciones como Hato Mayor, Sabana de la Mar, San Pedro de Macoris, Monte Plata, Bayaguana, La Romana, El Seibo e Higüey y apeló a una rápida intervención del ministerio de Medio Ambiente, para que intervenga y evite la muerte por completo de los anfibios en la zona Este del país.
Asimismo denunció que hay inescrupulosos capturando ranas debajo de las plantaciones de cacao y lagunas, para vender sus ancas en hoteles turísticos de Higüey, La Romana y Juan Dolio, en San Pedro de Macorís.
“Los macos, cuando no es el pez Gato, un exterminador de las especies nativas del agua, son cazadores inescrupulosos dedicados solo a eso para vender las ancas que son consumidas por turistas franceses, españoles, mexicano y portugueses.
Explica la entidad ecológica que la especie de rana de la familia Leptodactylus fallax (pollo de las montañas) tiene una gran demanda en los hoteles, por los que “cazadores de macos”, la buscan para ganarse unos peces y dar ganancias pingües a los dueños de hoteles, que venden el exquisito plato de ancas ranas hasta mil 200 pesos.

Recordó que en la República Dominicana existen unas 74 especies de ranas y anfibios, 40% de las cuales son endémicas y viven entre los 600 y 3 mil metros sobre el nivel del mar, en bosques y montañas, donde no escapan de la mano criminal y ambicionista del hombre.
El género más abundante en la isla es el Eleutherodactylus, se caracteriza porque las
Ranas nacen totalmente formadas de los huevos, obviando la etapa del renacuajo.
La entidad sostiene que las ranas son actualmente la especie vertebrada en mayor peligro de extinción en los pueblos del Este del país, por lo que apeló a Medio Ambiente iniciar una batida contra los cazadores inescrupulosos y el pez Gato, que se ha convertido en una plaga en las aguas de ríos, arroyos y lagunas en la zona.
“Es una responsabilidad insoslayable del ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales actuar para evitar la muerte de los anfibios en las aguas de ríos y arroyos de la parte Este de la isla Hispaniola. Los recursos que nos ha dado la naturaleza y papá Dios no puede desaparecer por la inercia de la muleta oficial”, expresa un documento de prensa de la Sociedad Ecológica “La Vida Esa en los Árboles”.
El nombre de maco, sapo a rana es una palabra precolombina
Importancia
Los anfibios reportan valiosos beneficios al medio ambiente, ya como bioindicadores de la calidad de hábitat y controladores de plagas.
La literatura sobre los anfibios, explica que su desaparición puede provocar incrementos de brotes de enfermedades como malaria, fiebre amarilla y dengue hemorrágico y causar pérdidas en los cultivos dados por el incremento de las plagas.
También, las alcaloides, las toxinas e otras sustancias que son segregadas a través de la piel de los anfibios, son utilizadas en la producción de nuevas medicinas.

Conservación
Se denuncia que por centurias de años se vienen produciendo o registrando magnos exterminios en las poblaciones de anfibios de todo el mundo, al destruirle sus hábitats naturales.
La contaminación de las aguas, la introducción de especies exóticas, el calentamiento global y la aparición de nuevas enfermedades, son parte de los factores que han contribuido gradualmente con la desaparición de los anfibios.
Rana verde
La rana verde arborícola de la Hispaniola (Hypsiboas heilprini) es una especie endémica de la familia Hylidae. Habita en bosques tropicales o subtropicales cerca de ríos y arroyos de poca corriente.
Es más común en áreas montañosas como la Cordillera Central, la Cordillera Septentrional, la Sierra de Neiba y la Sierra de Yamasá y El Valle de Hato Mayor.
Los adultos de esta especie tienen un tamaño máximo de 5 centímetros de longitud. La parte dorsal es lisa y presenta un color verde pálido o verde grisáceo o marrón verdoso. Los pies y los laterales del abdomen son de color anaranjado. La parte inferior es blanco crema y los labios son amarillo-verde pálido. Los iris de los ojos de los machos son plateados, mientras las de las hembras son dorados o marrón metálico.
Se alimenta principalmente de insectos y otros pequeños invertebrados. 

Durante la temporada de apareamiento, los machos llaman a las hembras desde piedras, arbustos y lianas cerca o dentro del agua. Las hembras ponen los huevos en las paredes de pequeñas cuevas en los márgenes de los arroyos.  
La rana arborícola verde está amenazada de extinción por la destrucción de su hábitat natural en la República Dominicana.
De esta especie hay gigante, que son muy melodiosa al cantar en horas nocturnas
Especies Endémicas
Aquí enumeramos las distintas especies, todas en dramático peligro de extinción, primero por el pez Gato y luego por la mano del hombre, principalmente en la región Este, donde son capturado para vender sus ancas en hoteles para ricos platos a turistas.
La Rana de las Rocas de Barahona (Eleutherodactylus alcoae)
El Sapo Crestado Sureño (Bufo guentheri)
El Calcalí (Eleutherodactylus abbotti)
La Rana Gigante de la Hispaniola (Eleutherodactylus inoptatus)
La Rana Arborícola Gigante de la Hispaniola (Osteopilus vastus)
La Rana Platanera o Rana Común de la Hispaniola (Osteopilus dominicensis)
La Rana Amarilla o Maquito del Pueblo Viejo (Osteopilus pulchrilineatus)

La Rana Arborícola Verde de la Hispaniola (Hypsiboas heilprini)

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