Robos y atracos intranquilizan en San Pedro de Macorís

MANUEL A. VEGA

SAN PEDRO DE MACORÍS.- Esta ciudad que en su origen perteneció a la Villa de Cayacoa y al cacicazgo de Higüey y donde han salido los mejores peloteros de Grandes Ligas, vive atemorizada por la ola de violencia que la sacude, con sus secuelas de muertos, heridos y un auge excesivo de consumo, venta y distribución de drogas narcóticas.

En San Pedro de Macorís se producen más de 20 atracos y robos por día y los afectados han decidido no ir a querellarse a la policía, debido a que los delincuentes son conducidos al Comando Sureste y cuando se acude presentar querella, los delincuentes son vistos abandonar el cuartel ante el asombro de las víctimas.

La ola delincuencial que afecta a esta laboriosa, pero olvidada ciudad del Este del país, es asociada al consumo y venta de drogas narcóticas.

El periódico Diario Noticia, reseña una breve noticias que revela que la situación caos y desorden que han implantado los delincuentes se está originando a toda hora del día y la noche, sin que las autoridades policiales intervengan para enfrentar la criminalidad, robos y atracos que se comenten en la generalidad de los barrios de la sultana del Este.

“En San Pedro de Macorís los antisociales se roban diariamente entre cuatro y cinco motocicletas, tanto de los parqueos de los establecimientos comerciales como en atracos a mano armadas”, señala el citado periódico digital.

Los petromacorisanos están demandando del nuevo general policial, Augusto Sena Rojas, redoblar el patrullaje en los diferentes barrios, a fin de hacerle frente a la extrema delincuencia que permea esta ciudad del Este del país.

Los robos, atracos y asesinatos se producen con mayor crudeza en sectores como Punta de Garza, Barrio Lindo, México, Pedro Justo Carrión, Miramar 24 de Abril, Santa Fe, Las Flores, Filipina y Barrio Blanco, entre otros.

Diariamente se roban carros, motores, passola, sin que se vea la acción policial.

El periodista Agustín Vega, fue el último comunicador en ser afectado con el robo de una motocicleta Suzuki 100, que le fue sustraída mientras pagaba la factura eléctrica de Almacenes Iberia, en el centro de la ciudad.

Se denuncia que la policía se muestra indiferente ante la presencia de los delincuentes y que muchos agentes son vistos a menudos compartiendo en colmadones con los antisociales más conocidos de la ciudad.

Sectores organizados de San Pedro de Macorís han denunciado que el auge de la delincuencia en San Pedro de Macorís es más creciente por lo benigno que es la justicia, que alegadamente dejan en libertad a los delincuentes por dinero.