LUIS D. SANTAMARIA |
POR LUIS D. SANTAMARIA
El candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Danilo Medina está obligado a carabina a ganar las próximas elecciones, ya que de lo contrario el mismo 20 de mayo finaliza su carrera política.
Eso lo saben los estrategas de campaña y por eso tratan desesperadamente cómo convencer al pueblo de que no es igual de lo mismo y que hay diferencia en la forma de gobernar entre Leonel Fernández y un actual gobierno de Medina.
Lo grande del caso es que el pueblo mismo es que lo ha asociado al gobierno por alegadamente haber sido el artífice de la composición del mismo, cuando siendo secretario de la presidencia influyó en el nombramiento de todo el gabinete.
Entonces, ahora no pueden pretender desligarse de este asumiendo lo bueno y no lo malo del mismo, como por ejemplo la pobreza extrema en que ha sumido a la mayoría de los dominicanos, que han visto en los últimos ocho años degradar sus condiciones de vida.
Danilo Medina por más esfuerzos que haga no logrará distanciarse del lastre que significan los dirigentes peledeístas que ocupan cargos en el gobierno y que avergüenzan su campaña por alegadamente haberse enriquecidos desde el poder
Otro aspecto que se refleja negativamente en las aspiraciones del candidato oficialista es la poca acogida que ha tenido en el seno del pueblo, principalmente entre los sectores más pobres que son los que más se esfuerzan en acudir a votar el día de las elecciones.
Los estrategas de campaña peledeístas están encharcados en tremenda encrucijada, primero tratar de vender por todos los medios a su alcance la figura del candidato y luego tratar de convencer al pueblo de que en realidad este no representa más de lo mismo que nos gobierna hoy
Por más esfuerzos que hagan no lograrán su objetivo, porque la realidad es otra y es que el pueblo se cansó, se hartó del Partido de la Liberación (PLD) en el gobierno y busca salir de este a como de lugar, tal y como lo reflejan todas las encuestas que se han realizado hasta el momento.
No hay forma de que Danilo Medina pueda desligarse del gobierno, cuando en realidad está arropado por los principales funcionarios de este, muchos de los cuales han sido cuestionados acremente por la ciudadanía por alegadamente haberse hecho multimillonarios a costa de los recursos del pueblo.
A todo esto se suma el hecho de que desde las esferas del gobierno quieren imponerle a la primera dama, doctora Margarita Cedeño de Fernández como la compañera de boleta con el marcado interés de que si ganar poder garantizar impunidad a los funcionarios corruptos.
El interés de que la primera dama sea la compañera de boleta de Danilo Medina se atribuye a influyentes funcionarios que son señalados por el rumor público de corruptos y haberse hacho millonarios con los recursos del erario público y quienes pretenden seguir disfrutando de los beneficios en el poder más allá del 2012.
Otra cosa que le está haciendo mucho daño al candidato presidencial oficialista y que no le permite avanzar en la preferencia del electorado es la campañita sucia que desde los litorales de su partido se tiene montada en contra del ex presidente Hipólito Mejía.
Cuando usted vez a un personaje como Francisco Javier García, flamante coordinador nacional de campaña del candidato oficialista utilizando frases peyorativas para referirse al candidato presidencial perredeísta, lo que hace es restarle a Medina, ya que esto crea un sentimiento de rechazo en el seno de la población.
Acciones como esa en vez de hacerle bien al candidato presidencial peledeísta, lo que le hace es mal y esto se está reflejando negativamente como lo señalan los resultados de los muestreos de opinión reflejados en las últimas encuestas.
Danilo Medina, lamentablemente en vez de avanzar, lo que hace es retrocede en la preferencia del electorado al igual que el partido oficial. Esto sin lugar a dudas preocupa grandemente a los estrategas de campaña peledeísta.
Por eso es que usted vez el afán por acabar de destruir al Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), queriendo forzar a la dirigencia de esa organización política a que apoyen en la primera vuelta al candidato presidencial oficialista.
Han dividido a esa organización política entre los que están en el gobierno, principalmente en la nómina del Ministerio de Relaciones Exteriores y los que se están tragando un cable al igual que la mayoría de los dominicanos.
El caso es, que su desesperación por tratar de resaltar la figura de Danilo Medina, los peledeístas han tenido que recurrir ahora a periodistas pagados de la vieja guardia, que muchos creían retirados para que escriban en los medios de comunicación a favor del candidato presidencial oficialista.
Es el pueblo que se ha dispuesto sacar al PLD del poder y no hay forma de variar esta decisión por más esfuerzos que se hagan desde el gobierno y otros litorales que se han beneficiados del estado de miseria y marginalidad en que vive la mayoría de los dominicanos.
El país no soporta más la situación de pobreza colectivo en que lo ha sumido este gobierno, mientras crece la inseguridad ciudadana, las alzas de los combustibles, el incremento de precios de los alimentos, los medicamentos, se intensifican los apagones y todos los males sociales no resueltos.
Para Danilo Medina no hay mañana porque de perder en las próximas elecciones tendrá necesariamente que retirarse de la actividad política, tal y como lo hacen los grandes deportistas que cuando llegan al ocaso de su carrera.
Si no pasa esta oportunidad que se le brinda, entonces que recoja sus motetes y se dedique a otra cosa por porque todo apunta a que el doctor Leonel Fernández tratará por todos los medios a su alcance de volver a ser candidato y buscar nuevamente la presidencial en las elecciones del 2016.
Así es que Danilo Medina tu futuro político está condicionado a que gane las próximas elecciones porque de lo contrario ahí mismo habrá fracasado.
El autor es periodista. Reside en Monte Plata
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