Dos juegos, dos victorias. Es lo que cualquier equipo que esté luchando por obtener un campeonato pudiera pedir. Claro, y seguir ganando hasta completar la hazaña.
Al menos por ahora los Leones del Escogido parecen estar en una situación relativamente cómoda tras vencer a las Águilas Cibaeñas 4 carreras por 1 en el segundo partido de la serie final del béisbol profesional dominicano.
Otra vez el pitcheo rojo hizo de las suyas. Nelson Figueroa se reencontró consigo mismo luego de mostrarse tambaleante en un par de salidas previas. En está ocasión amarró los bates de su otrora equipo lanzando 6.1 innings en los que permitió 7 hits y una sola carrera. Ponchó a 4 rivales y puso su récord en 2 triunfos y 2 derrotas.
Pero la exhibición desde el montículo no iba a terminar ahí. Nelson Payano, el lanzador importado Pat Vendiste, todo un acontecimiento al usar ambos brazos para tirar, y Fernando Rodney se combinaron para 2.2 episodios perfectos. Nada de hits, nada de carreras, nada de bases por bola. La labor de Rodney resalta. Es casi una burla lo que está haciendo con sus adversarios.
A la ofensiva el daño lo hicieron 3 hombres. Mauro Gómez, Julio Lugo y Denis Phipps 7 de los 8 hits del conjunto y remolcaron las 4 vueltas producidas. Gómez conectó su cuadrangular 5 de la postemporada.
Ellos supieron aprovechar la inconsistencia del lanzador abridor contrario Manauris Báez, quien fue el derrotado al propiciar 2 carreras y 5 hits en 4 entradas. También capitalizaron la debacle de Ángel Castro quien empezó su trabajo de manera dominante, pero a quien posteriormente le fueron descifrados sus secretos. Le pisaron la goma un par de veces.
Este lunes se efectuará el tercer choque entre las cuyayas y los melenudos en el estadio Quisqueya a partir de las 7:30 de la noche.
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