AHORA QUIEREN CALLAR A LOS PERIODISTIAS ROBERT VARGAS Y GENRIS GARCIÍA

SANTO DOMINGO ESTE.- La empresa textilera multinacional Gildan, que tiene una zona franca en Guerra, ha lanzado su ejército de abogados sobre los portales Vigilanteinformativo.com y Ciudadoriental.org con la intención de que sus respectivos directores, Genris García y Robert Vargas, sean condenados al pago de indemnizaciones multimillonarias y enviados a prisión por el presunto delito de difamación.

La multinacional ha puesto en movimiento una serie de procedimientos judiciales confiados en que los tribunales condenarán a los dos periodistas, en lo que aparenta ser una abierta ofensiva de la empresa canadiense por lograr que estos medios dejen de dar cobertura a denuncias reiteradas sobre contaminación al medioambiente y, en ocasiones, a la represión sindical en su empresa.
A Ciudad Oriental y Vigilante Informativo la multinacional extranjera ya le ha entregado un amplio legajo de documentos en los que sustenta sus imputaciones y amenazas de obtener que García y Vargas sean enviados a prisión y condenados al pago de sumas multimillonarias.
La reacción se ha producido varios meses después de que la residencia del corresponsal de Ciudad Oriental en San Luis y Guerra, Diego Torres, fue blanco de un atentado a balazo por elementos desconocidos.
El atentado criminal, con una bala disparada directamente en el trayecto de donde Torres se sentaba frente a su computadora en su residencia de la carretera Mella, se produjo el pasado día 22 de julio.

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Esa noche, a la residencia de Torres se presentaron los directores de Vigilanteinformativo.com y de Ciudadoriental.org, oficiales de la Policía y técnicos de la Policía Científica. Los últimos recabaron evidencias, se llevaron el proyectil que quedó incrustada en una vitrina de la humilde vivienda de Torres y la cápsula que encontraron en el pavimento.
En algún momento, uno de los oficiales preguntó por posibles sospechosos o casos que Torres pudiera estar siguiendo, y se le informó que el caso de mayor envergadura era el de abundantes denuncias de vecinos por vecinos de Guerra sobre la contaminación ambiental que le atribuyen a la textilera canadiense.
Como consecuencia, Vigilanteinformativo.com escribió el reporte titulado "¿Quién mandó a matarlo?; PN investiga atentado contra Diego Torres", que la Gildan consideró difamatorio. Ciudad Oriental lo reprodujo íntegramente.
La Policía nunca profundizó las investigaciones y estas quedaron en el limbo.
Sin embargo, la Gildan, reaccionó furiosa y puso a sus abogados en movimiento intimando poco después a García y a Vargas para que se retractaran del contenido del artículo ¿Quién mandó a matarlo?; PN investiga atentado contra Diego Torres.
Los dos portales respondieron con un artículo titulado "Ciudad Oriental carece de evidencias para imputar a la Gildan o cualquier otro sector por el atentado contra Diego Tórres".
Los ejecutivos de la multinacional Gildan pueden estar seguros de que si tuviéramos aunque sea una sola evidencia concreta de que alguno de los suyos pudiera estar implicado en ese atentado terrorista, lo habríamos acusado ante la opinión pública.
Varios meses después de ese atentado, Ciudad Oriental no descarta ninguna posibilidad y cualquiera de los que se han sentido afectados por nuestras publicaciones, para nosotros, son sospechosos.
Envalentonados, la Gildan y sus asesores creen que ha llegado el momento para silenciar a Ciudad Oriental y Vigilanteinformativo.com y enviar a sus respectivos directores a prisión y obligarlos al pago de una indemnización multimillonaria.
La Gildan es una empresa que se ha visto implicada en pleitos judiciales con sus empleados por la presunta violación a la libertad sindical y ha sido objeto de investigaciones por parte de la Organización Internacional del Trabajo.
También ha sido objeto de investigaciones por parte del Ministerio de Mediambiente que ha atendido denuncias de contaminación ambiental luego que miles de peces del río La Pipa, de Guerra, murieran a consecuencia del vertido de sus químicos.
Ciudad Oriental ha acogido denuncias de comunitarios y empresarios de Guerra que se refieren a la contaminación que atribuyen a la Gildan.
Mientras tanto, la Gildan ha iniciado una segunda gestión judicial directamente contra Ciudad Oriental y Robert Vargas en particular, después que este portal acogió una denuncia de su corresponsal Diego Tórres, en la que este daba cuenta de que contratistas al servicio de la Gildan talaron al menos 32 árboles propiedad de la finca familiar en La Reforma de El Cabreto.
Para acoger esta denuncia, Ciudad Oriental se amparó en la denuncia hecha por Tórres ante la Policía Nacional teniendo como respaldo un levantamiento hecho por el alcalde de la comunidad.
El pasado fin de semana, el encargado del Departamento de Medioambiente y Recursos Naturales de la Junta Municipal de San Luis, Ingeniero Moisés Mejía Sánchez, certificó mediante un levantamiento que dos suplidores de la Gildan fueron quienes hicieron el corte indiscriminado de 32 árboles, según copia de documento entregado a Ciudad Oriental.
Al parecer, la Gildan pretende lograr que con el encarcelamiento de Robert Vargas y Genris García, Ciudad Oriental y Vigilanteinformativo.com dejen de acoger las denuncias de los comunitarios.
Particularmente, Robert Vargas está en proceso de constituir abogados para afrontar los intentos de la empresa extranjera por colocar una mordaza a Ciudad Oriental.
-"Si tengo que ir a prisión por divulgar las denuncias de comunitarios que se oponen a la contaminación mediambiental o defender la integridad de cualquiera de nuestros colaboradores, entonces iremos con gusto a la cárcel", dijo Vargas.
Pronunciamientos similares hizo García, quien por muchos años ha dado seguimientos a los problemas medioambientales en la República Dominicana y Haití.