Muere “Primo Lindo” en Hato Mayor

MANUEL ANTONIO VEGA

HATO MAYOR.- Siempre se consideró un hombre lindo, por eso lo del mote que lo hizo ser uno de los personajes más conspicuo y declamador de lindas e inventadas poesías y décimas.

Alegró a los mortales, ricos y pobres, pero vivió una vida de hombre harapiento, que no le importó la riqueza.

Se nos acaba de ir de entre nosotros, Primo Lindo, considerado uno de los personajes más conspicuo que le quedaba a Hato Mayor del Rey.

Como vivió murió, rodeado de pobreza y enfermo.

Cuentan que una vez hizo una fuerza, que le hizo crecer los genitales.

Cantaba décimas y hacía cuentos por paga, y a veces, atentaba contra el pudor público y la buena costumbre, al masturbarse en público.

Bueno, vivió en su mundo. Eso lo hizo feliz por más de 70 años.

Las poesías de amor que declamabas eran aclamadas por los parroquianos y humildes.

Los misántropos que pululan por las calles de Hato Mayor, llegaron a hacerle daño y burlarse de él.

Era afable y cortés, haciendo reir y disfrutar a los cuerdos con su loquera.

Se nos fue, pero lo recordaremos por muchos tiempos en las peñas y tertulias, que siempre asaltan a los grupos humanos.

Primo Lindo, yo te recordaré siempre. Fuiste para mí alguien importante, que me enseñó a reír cuando guapo estaba; a gozar cuando más lo necesitaba y conocer mi interior cuando te miraba.

Paz a tu alma y espero sea feliz y alegre en el lugar donde Dios escoja para ti, que sé será bueno.

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Las poesías de amor que declamabas eran aclamadas por los parroquianos y humildes.

Los misántropos que pululan por las calles de Hato Mayor, llegaron a hacerle daño y burlarse de él.

Era afable y cortés, haciendo reir y disfrutar a los cuerdos con su loquera.

Se nos fue, pero lo recordaremos por muchos tiempos en las peñas y tertulias, que siempre asaltan a los grupos humanos.

Primo Lindo, yo te recordaré siempre. Fuiste para mí alguien importante, que me enseñó a reír cuando guapo estaba; a gozar cuando más lo necesitaba y conocer mi interior cuando te miraba.

Paz a tu alma y espero sea feliz y alegre en el lugar donde Dios escoja para ti, que sé será bueno.