Manuel Antonio Vega
La muerte a destiempo del educador, político y trabajador social, Rafael Severino (Rafaelito) constituye un duro golpe para Sabana de la Mar, toda vez que era uno de los mejores protagonistas de la lucha por el desarrollo del costero municipio.
Era un ser franco y sincero y no claudicaba en su lucha por un Sabana de la Mar mejor.
Fue activo y combativo siempre.
Yo perdí a un gran amigo, que siempre colaboró con mi trabajo periodístico en aquella zona ricas en recursos naturales, pero olvidada por la muleta oficial en todos los gobiernos.
Siempre lo vi en la lucha por la carretera Hato Mayor- Sabana de la Mar, por el muelle, hotel Villa Suiza, el sistema sanitario, por atención a los arroceros y pescadores y denunció al narcotráfico.
Aunque era educador de vocación y profesión, siempre se le vio andar con la ropa de lucha y combate por la consecución de obras para su añorada Sabana de la Mar.
Realmente su fallecimiento es un golpe para este abandonado pueblo y demoledor para sus familiares y para los que fuimos sus amigos.
Hasta el momento de su muerte se desempeñaba como director de la escuela Abigail Mejía, donde dejó huellas imborrables
Nadie ocupará su espacio social, que ganó en base a un constante luchar porque las cosas estuvieran bien en su pueblo.
Jamás de olvidaré Herman o de lucha por Un un Sabana de la Mar mejor.
Sé que nos volveremos a ver, por eso un hasta luego.
Rafelito siempre sera recordado en nuestro pueblo, por sus asañas a favor de los mejores intereses de su pueblo. nuestra Sabana de la Mar.
ResponderEliminarGracias hno por tus palabras de ánimo. Mi flia y yo apreciamos este artículo. Mi Padre tuvo una vocación de servicio y siempre procuraba la ayuda desinteresada de los demás.
ResponderEliminarUn abrazo,
Álvaro Severino