Manuel Antonio Vega
Antes, vehículo de transporte y herramienta de trabajo, el caballo es ahora protagonista del ocio y del deporte en este municipio costero de la provincia Hato Mayor.
Domados para las andanzas rurales, el caballo es en esta zona el medio de transporte ideal para conocer la frondosidad de trillos y pasadizos que llevan a las empinadas y boscosas montañas de Los Haitises, donde el solo mirar maravilla a los mortales.
Las cabalgatas son organizadas por clubes de rodeo y ranchos de caballos de paso fino, que se han establecidos en la zona para dar el servicio. Los turistas gustan de montar los caballos andaluces, a los cuales consideran valientes, rápidos y de buen paso, temperamentales cuando así se les exige.
La montura a caballo también se convierten en Sabana de la Mar en convite de cantos y alegría entre los turistas, que al paso de los animales por los angostos lugares montañosos, van cantando canciones, cuyos estribillos alegóricos al rey Napoleón, hacen de la cabalgata una aventura señorial.
Actualmente en Sabana de la Mar está Rancho Rey, un lugar donde, además, se brindan los servicio de piscina, restaurante y excursiones a las montañas para acercarse al trinar de las aves y el alto follaje.
Se destacan como yeguadas reproductoras la Árabe, la Cruzada y principalmente la Pura Raza Española, conocida en el mundo entero como Andaluza.
Las cabalgatas
“En Sabana de la Mar es posible andar a caballo por parajes insospechados durante varias jornadas sin pisar tierra, alternando la naturaleza con nuestras más rancias tradiciones culturales”, explica Tony Demorizi, empresario turístico del municipio.
El ‘tac tac tac’ de las pisadas de los ejemplares se extiende por las altas cumbres de Los Haitises hasta el solitario embarcadero de Caño Hondo, que es la puerta al río Jibales, que lleva a las bahías San Lorenzo y Samaná en el Atlántico y que bañan la reserva científica, zona rica en fauna y flora.
Conocer Los Haitises montando a caballo da la impresión de que se está regresando a la antigüedad y siendo testigo de paisajes encantadores que sólo esta zona del Este dominicano puede brindar.
Empedrados y cenagosos caminos asaltan a cada instante, mientras que hay que tener buena vista para no quedar atrapado por los bejucos indios y las enredaderas que a cada paso van tejiendose de forma natural en el bosque.
Cada día que pasa Sabana de la Mar tiene más caballos y turistas que la visitan para cabalgar. Es una oferta turística deportivo-turístico que tiene como protagonista al animal.
Las rutas turísticas en Sabana de la Mar y El Valle permite que el turistas disfrute tanto de las costumbres como de la rica artesanía y procesamiento del ámbar de esta zona.
OTRAS AMENIDADES PARA EL VACACIONISTA
Domar una potranca o un torete es parte del paquete, y requiere agilidad para no ir a parar al suelo. Esta parte se considera una aventura, que puede implicar peligro, pero que también gusta a nativos y extranjeros.
Mojarse al caer un aguacero hace más rural la monta de caballo. Se estima que entre Sabana de la Mar y El Valle, dos municipios de Hato Mayor, hay más de 500 caballos dedicados a excursiones y cabalgatas.
Durante el recorrido también podrá visitar la magnífica ruina de los indios, que se cree fue construida por los indios del cacizcago de Guarionex, para refugiarse e huirle a las tropas españolas.
Al terminar la jornada, los excursionistas podrán disfrutar de los restaurantes ecológicos que se han establecidos en la zona.
Para la Semana Santa, la monta a adquiere mayor connotación, ya que se mezcla con lo espiritual en forma de romerías y procesiones hasta los lugares santos del municipio, así como exhibiciones en las inmediaciones de los parques.
No hay comentarios:
Publicar un comentario