Hacinamiento es causa de muertes en cárcel de El Seibo

MANUEL ANTONIO VEGA

EL SEIBO. Las autoridades del Ministerio Salud Pública confirmaron que ocho internos de la cárcel General Pedro Santana fallecieron en los últimos años afectados de tuberculosis, sida, deficiencia renal, complicadas con otras enfermedades, lo que atribuyen consumo de drogas y el hacinamiento carcelario. Llamaron a la Dirección de Prisiones poner atención especial a la situación sanitaria en el penal.

Miguel Peralta, director provincial, Víctor Hiciano, encargado del área de Epidemiología, y Lucía Bélgica de la Cruz, encargada del Programa de Tuberculosis, en declaraciones a Diario Libre, explicaron que el hacinamiento es tan notorio que muchos internos tienen bacinetas en los baños.

Descartaron que exista un brote de tuberculosis en la cárcel, la cual pertenece al viejo sistema penitenciario y abogaron por la construcción de una cárcel modelo para poner a vivir más dignamente a los presos, “que duermen como sardinas, apiñados”.

Peralta llamó a la Dirección de Prisiones “para que enfatice con su departamento de salud en mejorar la situación sanitaria en el recinto”.

Hiciano, coordinador de Epidemiología de la provincia de Salud en El Seibo, dijo que actualmente hay solo cinco internos con la mycobacterium tuberculosis, de los cuales uno está grave en el hospital regional Antonio Musa, en San Pedro de Macorís.

Denunció que el consumo de drogas y alcohol dentro del penal han agravado la situación de salud de los enfermos de la enfermedad.

Explicaron que muchos de los casos registrados en los últimos dos años son adquiridos dentro del penal y que un reducido número de los internos llegan afectados con la bacteria desde Higüey y Hato Mayor.

Fallecidos

Al ofrecer las cifras de víctimas, Lucía Bélgica de la Cruz, encargada del Programa de Tuberculosis en la provincial de Salud, dijo que este año solo han muertos dos reos y otros cinco el pasado 2016. Agregó que de los cinco internos muertos este año, solo dos fueron por tuberculosis, de los cuales identificó a José Manuel del Carmen Severiano, 35 años, nativo de Hato Mayor y quien falleció en el interior de una celda. Purgaba una condena de 15 años por violación sexual.

Explicó que decenas de internos han adquirido la bacteria de la tuberculosis desde el 2003, siendo 27 debidamente curados.

Expresó que en el penal, además, existen varios internos con el virus del VIH-SIDA, quienes están recibiendo tratamiento y los retrovirales y que evolucionan satisfactoriamente.

Sobrepoblación

Peralta dijo que se malvive dentro del penal, donde hay una población de 892 internos, en una cárcel construida en el gobierno de Rafael Leónidas Trujillo Molina, para unos 280 reos.

“Es apiñados, tirados en colchonetas en los pasillos y el espacio donde operaba la iglesia del penal, ya tiene más de 100 internos, mal durmiendo y respirando el calor y absorbiendo la mycobacterium tuberculosis”, indicó.

Recordó que la tuberculosis se disemina a través del aire, por lo que el poco espacio en que los internos desarrollan su vida cotidiana facilita la expansión de la bacteria.