Manuel Antonio Vega
EL CERCADO, El Seibo.-
Prebisterio Ortega (Onguí), fue un empresario agrícola y político del distrito
municipal de San Francisco-Vicentillo, en la provincia de El Seibo que se
distinguió por ser hacedor y cultivador de buenas amistades, virtudes que lo
llevaron al éxito empresarial y social en toda la región Este.
Vivió entre los años de
1943 y 2016, siendo sus padres Lorenzo Mota y Cipriana Ortega, de quien heredó
el amor al trabajo y la familia.
Desde que nació se pasó
sus primeros años en la vida íntima de su hogar, donde con el ejemplo y la
dirección de sus honrados padres, comenzó en su mocedad a sentir el duro
trajinar de dedicarse al trabajo serio y honrado, para ser alguien en el
futuro; como le fue sin lugar a duda.
En su mocedad, Onguí se
dedicó a estudiar en la escuela de la comunidad, en la cual llegó a cursar un
sexto de primaria, ya que tuvo que dedicarse al oficio de jornalero en fincas
de la comunidad, para ayudar a sus padres en los gastos del hogar y comprarse
una y que otras ropas como, pantalones, camisas, calcetines y calzados. Llegó a trabajar en la finca de
Don Lolín Amparo, un influyente hacendado del pasado siglo XX en la
comunidad de El Cercado-
Al matrimoniarse con Ana
Calderón y en 1969 nacer su primera hija, la vida de Prebisterio Ortega, dio un
giro de 180 grados, pues el futuro le deparaba mayores responsabilidades y
desafíos.
El nacimiento de
Birmania, su primera hija con Ana, le hizo cambiar y dejar el machete para convertirse en
pregonero de billetes y quinielas de la Lotería Nacional, no solo en la sección
San Francisco, sino en la ciudad de Hato Mayor del Rey. La venta de quinielas,
que era el juego de azar más popular de República Dominicana en el siglo XX, le
favoreció, llegando a hacer algunos ahorros, con los cuales más tarde instaló
un pequeño colmado.
Su visión de progreso y
desarrollo económico no se detuvo en el colmado, pues para el año 1977 decide
alquilar un local, en el cual combinó la venta de provisiones con la compra de
cacao y café.
A partir de entonces,
todo le fue de dichas y bendiciones, comprando para 1978 la casa donde actualmente vive su familia. Aquí se
dedicó hasta su muerte, ocurrida el 28
de enero del 2016, a la compra de cacao, café y al cultivo de diversos rubros
agrícolas, así como al pastoreo de animales.
Es sin quizás una de la
persona de negocio de finales del siglo XX y principios del siglo XXI que más
se destacó como una de las grandes figuras del comercio agrícola de San
Francisco-Vicentillo.
Con su esfuerzo, ahínco y
perseverancia dejó de ser niño pobre para ser un gran y próspero comerciante en
las zonas rurales de El Seibo y Hato Mayor.
Su vida en los negocios
fue austera y escueta, por lo que alentaba a los demás hacendados a hacerlo de
igual manera.
Vivió 73 años,
naciendo el 26 de marzo de 1943, dejando
de existir el 28 de enero de 2016, pero sigue vivo en el corazón de quienes le conocimos,
que recordaremos siempre, venerando su ejemplo de servidor que nunca desmintió
su bien ganado nombre de hombre culto y leal amigo.
Dejó como legado a su
familia y amigos, su largo historial de negocio y hoja de servicio que podrán
servir de marco de referencia para las presentes y futuras generaciones, que
hoy inician tareas en el difícil mundo del emprendimiento empresarial.
Fue un inspirador del
desarrollo agrícola, sector que estimuló con la creación de su empresa
“Comercial Ortega”, la cual dedicó a la compra de cacao, café, china, cera de
miel de abejas y otros frutos del país.
Llegó a
comercializar cacao con las firmas Roig, Cortés Hemos.
Hizo empatía con empresarios de la talla de Rafael Perelló y Don Masú Perelló, padre e hijo, propietario de Café Indubán, la familia Roig, así como de los agroempresarios Don Juan Barceló Artiguez y sus hijos Ricardo y Juanito Barceló Salas y Sabino Mota.
Hizo empatía con empresarios de la talla de Rafael Perelló y Don Masú Perelló, padre e hijo, propietario de Café Indubán, la familia Roig, así como de los agroempresarios Don Juan Barceló Artiguez y sus hijos Ricardo y Juanito Barceló Salas y Sabino Mota.
Frente a la que fuera su
residencia, en la comunidad de El Cercado, sus hijos fijaron una imagen con su
rostro, con la cual buscan perennizar o recordar el valor que
significó en la comunidad.
Profesaba la fe católica.
Líder comunitario
En su afán de lucha y de
colocar a su lar nativo a la altura de otras comunidades desarrolladas, se
enroló en diversas actividades de carácter comunitaria, social, deportiva e
instituciones de servicios desde El Cercado y la ciudad de Hato Mayor.
Es así como logra nuclear
a otros productores y constituye la Asociación de Agricultores de El Cercado,
de cuyo seno emprendió luchas para
arrancar a las autoridades municipales y el gobierno Central, la reparación de
los caminos vecinales y la implementación de programas de control de plagas y
enfermedades en las plantaciones de cacao, café, rubros agrícolas y de cítricos.
Llegó a ocupar la
presidencia de la Sociedad de Padres y Amigos de la escuela “Miguel Amparo”, donde logró coronar con
existo la construcción de un moderno edificio.
Fue fundador y presidente
en varias ocasiones de la Asociación de Porcicultores de Hato Mayor, donde
afianzó la producción de cerdos entre cientos de productores de aquella
provincia del Este del país.
Perteneció a la Logia
Generación 21 de Enero.
Fundó el Comité de Desarrollo sección San Francisco, de cuya plataforma de desarrollo organizó por cinco años la celebración de la primera fiestas patronales de la sección San Francisco, en las cuales llegaron a ser reinas: Esmita Valdez. Jazmin García.
Maribel González, Joanna Carolina Castro Mota y Kenia Ramos Peguero, esposa del locutor Merlin Jiménez.
Participó y fue dirigente de la Comisión Nacional de Cacao, de donde se logró arrancarle al gobierno de Leonel Fernández unos 400 millones de pesos para el mejoramiento de las fincas cacaotaleras, afectadas por el ciclón Georges en 1998.
Fundó el Comité de Desarrollo sección San Francisco, de cuya plataforma de desarrollo organizó por cinco años la celebración de la primera fiestas patronales de la sección San Francisco, en las cuales llegaron a ser reinas: Esmita Valdez. Jazmin García.
Maribel González, Joanna Carolina Castro Mota y Kenia Ramos Peguero, esposa del locutor Merlin Jiménez.
Participó y fue dirigente de la Comisión Nacional de Cacao, de donde se logró arrancarle al gobierno de Leonel Fernández unos 400 millones de pesos para el mejoramiento de las fincas cacaotaleras, afectadas por el ciclón Georges en 1998.
Planes sociales
Dar y ayudar le
recordaban su mocedad, donde tuvo que pedir favores para abrirse paso, para ser
hombre de bien.
Por eso siempre ayudaba a
los necesitados, a las iglesias, clubes e instituciones de servicios.
A inicio de cada año
escolar llevaba útiles a los estudiantes de las zonas cacaotaleras, como
juguetes a los niños cuando llegaba la celebración de los Santos Reyes.
Era amante de la buena
música y el beisbol, llegando a
patrocinar equipos de béisbol de la zona.
Tenía y practicaba la
política como un sacerdocio, llegando a ser pieza importante en el mapa
político en la provincia de El Seibo, llegando a ocupar la presidencia del Partido Revolucionario Dominicano (PRD)
en lo municipal y provincial.
Llegó a ser regidor y a
ostentar la candidatura a diputado, la que sacrificó para dar paso a la alianza
PRD-UD en 1994, impulsada por José Francisco Peña Gómez y Fernando Álvarez
Bogaert.
Su liderazgo en el campo
político se llegó a consolidar de tal manera, que importantes políticos y
expresidentes de la República, llegaron a visitarlo, para conocer de cerca la
situación política de El Seibo.
Por su casa peregrinaron
los expresidentes Salvador Jorge Blanco, Hipólito Mejía, el líder histórico del
PRD, José Francisco Peña Gómez, así como los dirigentes Orlando Jorge Mera,
Eligio Jáquez, entre otros no menos importantes del partido del Jacho Prendío y
otras fuerzas políticas del país.
Era tenido como un audaz
conciliador en el campo político de la provincia El Seibo, donde ganó muchos
adeptos para sus proyectos políticos.
Hijos
No solo fue buen padre,
sino que el deseo de ver a sus hijos encaminados los estudios, lo apoyó hasta
hacerlo a todos profesionales en diversas áreas del saber humano.
Con su esposa Ana Calderón procreó a Birmania,
Jhonny, Víctor, Benjamín, Ana Iris,
Wendy y Denny. Además tuvo con otras mujeres a Juan Ortega (Moreno), Oscar, José Manuel y
crió a Rafael Perdomo
Se hizo rodear de buenas amistades y amigos, entre a ellos Julián Barina, Guillermo Silvio Severino,
Alcibíades Valdez, Moreno Zorrilla, Papucho Polanco, Melquiades Mejía.
Fue un verdadero aliado de la causa revolucionaria, llegando a proteger a jóvenes que se enrolaron en la izquierda como Heraldo González (Pirincho), Ramón Rosa,
José Miguel Peguero, Manuel Rosario, Jorge Vilorio, Benardino Mercedes (Nino JAD).
Se hizo rodear de buenas amistades y amigos, entre a ellos Julián Barina, Guillermo Silvio Severino,
Alcibíades Valdez, Moreno Zorrilla, Papucho Polanco, Melquiades Mejía.
Fue un verdadero aliado de la causa revolucionaria, llegando a proteger a jóvenes que se enrolaron en la izquierda como Heraldo González (Pirincho), Ramón Rosa,
José Miguel Peguero, Manuel Rosario, Jorge Vilorio, Benardino Mercedes (Nino JAD).
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